Así como es importante contar con los materiales apropiados cuando se está realizando una obra, así también es fundamental mantener la estructura en perfecta condiciones para proveerla de una larga vida útil. En el día a día hacemos una serie de actividades que pueden desencadenar que las paredes y muros interiores padezcan de humedad, no solo afecta a la estructura sino también a los habitantes del inmueble.
La humedad permite la aparición de hongos y mohos que suelen provocar infecciones y alergias que se traducen en problemas respiratorios sino se trata tiempo, también produce mal olor, caídas de pintura, frisos y hasta daños en los pisos. Esto se debe a las distintas actividades que hacemos a diario como ducharnos, el vapor que se produce durante la cocción de los alimentos, el lavado de trastes y ropa, el tendido de ropa y el planchado arrojan cantidades de humedad a los espacios.
La escasa o nula ventilación, la colocación indebida de los aires acondicionados y el mal aislamiento también contribuyen a la generación de humedad. Para evitar que esto sea un problema, Construcciones Yamaro da algunos consejos y así mantener los espacios en buen estado:
1.- Abrir las ventanas: El uso cotidiano del aire acondicionado o las ausencias durante gran parte del día pueden dificultar que las ventanas se abran continuamente, esta práctica hace que las corrientes de aire puedan entrar a todos los rincones de la casa y mantener seco todo el lugar.
2.- Usar un deshumificador casero: Esto permite reducir y controlar la humedad del ambiente sobre todo en el verano.
3.- Secar las puertas de la ducha: Luego de ducharse se debe secar tanto las baldosas como las puertas o cortinas de baño para evitar que la humedad se apropie de este espacio, igualmente se recomienda hacer una limpieza profunda con cloro o lejía quincenalmente.
4.- No tender ropa en espacios cerrados: Cuando se lava la ropa hay que tenderla en una superficie al aire libre como el patio y evitar hacerlo en lugares cerrados.
5.- Solucionar los problemas de tuberías rotas: Al percatarse de tener una fuga de agua, inmediatamente arreglar el problema, luego secar muy bien el suelo y paredes afectadas con una solución de cloro.
6.- Usar pinturas impermeables: Esto ayudará a que la humedad no se adquiera a las paredes.
7.- Emplear métodos caseros: El bicarbonato de sodio tiene la propiedad de absorber la humedad y ser antibacterial, por lo cual se recomienda para erradicar manchas de humedad muy difíciles, frotar la superficie con el producto dejar reposar un rato y luego quitar con un paño o cepillo.
