Las construcciones han venido dejando un impacto negativo en el ambiente, pues, desde el proceso para la fabricación de los materiales, pasando por el transporte de los mismos, la edificación de la obra hasta la vida útil de la estructura, conlleva a un aumento en la contaminación del planeta. Esto se ha venido aminorando gracias a los edificios sostenible que se han convertido en una alternativa ecoamigable para el ambiente, debido a que son construidos de tal manera que no representa daño para el ambiente en ninguna de sus etapas de construcción.
Cuando se habla de edificios sostenibles, ecológicos o sustentables se hace referencia a las construcciones en donde se utilizan tanto materiales como técnicas que no dañan al planeta durante cada proceso que conlleva esta actividad. A través del uso de la tecnología, se busca emplear de manera racional los recursos naturales y evitar o minimizar la generación de gases de efecto invernadero que contribuye al aumento del calentamiento global, esto también es válido cuando se realizan remodelaciones y reacondicionamientos de los edificios.
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Características de los edificios sostenibles
1.- Tener un diseño innovador: Estos edificios deben tener una idea innovadora en cuanto a su diseño ya que combina la tecnología con los recursos naturales que se encuentran alrededor para dar como resultado una estructura estéticamente agradable y altamente funcional.
2.- Usar materiales ecoamigables: En este tipo de construcciones es importante la utilización de materiales ecológicos o sostenibles durante todo el proceso, esto es con el propósito de reducir o minimizar la contaminación que se le hace al medioambiente.
3.- Estar en armonía con el ecosistema: Toda edificación sostenible debe estar ubicada de tal manera que no cause daño a la naturaleza y emplea materiales que se encuentran o forman parte del entorno como piedras, maderas y la misma vegetación.
Armando Iachini: Principios para la construcción de edificios sostenibles
Toda edificación sostenible se fundamenta en unos principios y Armando Iachini, director de Construcciones Yamaro, explica algunos de ellos:
- Tener una excelente calidad del aire
Uno de los aspectos principales que debe tener un edificio sostenible es contar con una excelente calidad del aire y esto se logra mediante la incorporación de materiales y mobiliarios de baja o nula emisión de compuestos volátiles. De igual manera, se debe evitar la presencia de elementos contaminantes como el asbesto, plomo y PCB, así como mantener bajo control la presencia de humedad para prevenir malos olores.
- Uso responsable del suelo
Cuando se procede a edificar una estructura bajo el concepto de sostenibilidad, uno de los principios a seguir es dañar lo menos posible el entorno y, sobre todo, del suelo donde se pretende llevar a cabo la obra. Es por esta razón que se debe integrar a todo el diseño arquitectónico para hacer de este un uso responsable porque es un recurso finito y no renovable, por lo cual es conveniente no excavar demasiado para conservar y proteger su estado natural.
- Incluir el entorno
Construir un edificio sostenible significa incluir todo el entorno en ello, es decir, sacar el máximo provecho de todos los recursos que está alrededor como, por ejemplo: el clima, la posición del sol, presencia de vegetación y cualquier otro elemento o material. Esto da como resultado, una estructura con capacidad para almacenar el calor durante los días fríos y mantener los espacios iluminados con luz natural.
Los edificios sostenibles suponen una alta inversión, sin embargo, su rentabilidad se observa con el tiempo, pues, permite reducir considerablemente el uso de energía eléctrica con la puesta en marcha de la luz natural. Esto genera un espacio cómodo, seguro y confortable para las personas que habitan dicha edificación.
