Ante la realidad que debemos cuidar de nuestro planeta, cada vez más se profundiza la práctica de hacer construcciones que ahorran energías tanto en el proceso, como para vivir. Tal es el caso de la nueva normativa de la Unión Europea que cada vez más, se vuelve más exigente hacia el gasto nulo de energía y también otras iniciativas como Ecotec que se direccionan hacia el uso de reciclaje.
Ecotec: una solución venezolana
La empresa impulsada por el emprendedor social y humanista alemán Andreas Froese, desarrollo un método de construcción con elementos de reciclado, utilizando tipo de residuos para la construcción de cualquier tipo de edificación, cuya tecnología consiste en construir casas enteras con botellas de plástico en lugar de ladrillos, de esta manera la empresa le da un giro verde a este sector.
La idea surgió del tiempo que Froese vivió en Centroamérica en que pudo ver la cantidad de pobreza que había en el país de Honduras y decidió hacer algo para construir una casa para todos los que no tenían hogar, concibiendo que los desperdicios de otros puede ser la materia prima para otros, especialmente aquellos decididos en hacer construcciones de carácter social.
Ecotec usa como ladrillos botellas PET las cuales son rellenadas con otros plásticos, tierra o escombros para darle firmeza, luego con una mezcla, las botellas son colocadas siguiendo el patrón constructivo de una casa sencilla y funcional de una sola planta.
El mayor proyecto que desea impulsar es la creación de tanques de almacenamiento de agua. La posibilidad de que cada persona pueda hacer su propia construcción, ayuda a empoderarlos ante cualquier situación y poder salir del problema, especialmente algo tan importante como conseguir agua.
Hacia una vivienda social eficiente
La tendencia cada vez más hacia la viviendas sociales, cuyo consumo de energía sea casi nulo, cumpliendo con una series de exigencias que serán aplicadas para el 2019.
Actualmente se impulsa que las construcciones ahorren más energía y utilicen fuentes renovables. Más que por una cuestión de ahorro monetario, lo importante es el evitar el mal uso de las fuentes de energía que no son inagotables.
Por ello las empresas deben adaptarse a estas medidas y las instituciones públicas deben capacitarse para afrontar la implantación de estos edificios de consumo de energía casi nulo.
Hoy en día, los edificios que han obtenido la certificación en España de Passivhaus, son los que más se han acercado lo que se espera de los edificios de consumo de energía casi nulo. Además de la capacitación, también ha sido importante que se han adoptado estas políticas a nivel regional, exigiendo desde ya ciertas exigencias para las construcciones verdes y sociales.
